Las palabras resonaron como un disparo en la madrugada y mi corazón se rompió en pedazos.Respiré profundamente y me puse a contabilizar friamente los daños.¡Eran millones de pedazos! Iba a ser casi imposible pegarlos de nuevo. En ese momento volví a sentir el vacio que había hecho estallar mi corazón; tanto dolor, tanta tristeza.. No, tenía que deshacerme rápidamente de esa sensación que me aprisionaba; tendria que coger una caja, meter allí los pedazos y esconderlos en el olvido oscuro de mi mente.
Intenté dormir pero el sonido de esas palabras resonaba en mi mente una y otra vez. Era tan fuerte su poder que sabía que aunque pudiera pegar de vuelta mi corazón nunca iba a olvidar esas palabras. En esos momentos vinieron mis miedos y desiluciones a levantarme del suelo con sus palabras de falso consuelo. Me decian : "-Yo te advertí que esto iba a pasar-", "-Es igual que siempre.. tu ya lo veias venir-", "-Debiste haberme escuchado cuando te advertí que no apostaras tu corazón-".
Me levantó la debil luz del amanecer;me habia quedado dormida escuchando mis temores. Me levanté dispuesta a seguir mi vida y me di cuenta que no tenía fuerzas ni motivación.. no tenia nada.
Entonces llegaste tu, el que había terminado con mis latidos, el que me había tirado a el rincón de amargura en el que estaba; y me diste tu mano aun temblorosa d miedo a tus acciones.
Yo me agarré de tu mano con miedo, me aferré a tu esperanza, a tu nueva ilusión y a tu promesa de volver a pegar mi corazón.
Y te sentaste y empezaste a pegar uno por uno los pedacitos, a veces no podias lograr que encajaran, a veces se rompia de nuevo mi corazón, pero lo lograste.
Y ese dia volví a vivir, volvi a sentir, volvi a apostar mi corazón y mi mundo.. por una promesa, una ilusión llamada amor.
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